Visto a la distancia, en perspectiva, asar en la parrilla conlleva un ritual. Existen un conjunto de procedimientos, reglas que lo convierten en una ceremonia. Desde ya pagano llevando implícito la noble función donde la costumbre se impone. Dicho así puede sonar a disparate por ser algo natural en cualquier criollo, extensión de nuestra conducta permítame entonces un pequeño análisis. Todos los asadores realizan siempre idéntica estrategia, las variaciones son casi nulas tiene mucho de culto. Le encargo a cualquiera la tarea harto difícil de querer cambiar el estilo de hacer parrilladas de un uruguayo o argentino. No tendrá éxito. Seguro con todo esto, psicólogos y sociólogos poseen material suficiente para un buen trabajo.
La parrilla es el instrumento fundamental en esta práctica y en lo relativo a Uruguay no hay mucha discusión. La estructura (rejilla en definitiva) se fabrica en general a partir de un marco de hierro ángulo o te, soporte de la sucesión paralela de varillas. Coexisten variaciones en la armazón en cuanto a forma y disposición, pero hoy no ampliaré. Al respecto la misma se apoya en tres patas, como mínimo, o bascula respecto a un eje sujeto a la pared. El modelo argentino es diferente su construcción también metálica, emplea hierro del tipo ángulo, en la zona en que se deposita la carne; dispuestos de manera invertida (su cara cóncava hacia arriba) a la semejanza de canaleta, en la que discurre la grasa caliente hacia fuera de la zona de brasas.
Aviso a los navegantes: no seré yo quien diga si este o aquel son mejores tecnologías; los dos me merecen el mayor respeto, el asado será más rico o más feo en función de la carne y del asador, he dicho.
El programa Carnes Argentinas fue un muy buen ciclo a cargo del cocinero argentino Ariel Rodríguez Palacios y emitido a través de la señal cable Utilísima en el pasado semestre. El programa presentó recetas utilizando diversos cortes de animales, (vaca, cerdo, cabra, menudencias) en su mayoría cocidos en la parrilla aunque también utilizo el disco de arado. El conductor hace patente su excelente formación académica, estudio en Francia en la escuela Lenotre, entre otras. Es director de la Escuela I.A.G en Argentina, escribió valiosos libros y ha conducido con mucha sapiencia e histrionismo varios ciclos de cocina, con un gran enfoque en la técnica. Quien escribe se sorprendió cuando el Argentino daba a conocer el “Sistema Uruguayo”. A su tiempo Ariel explico que los de la Banda Oriental recurrimos a la del tipo de varillas y al leñero (o brasero) a fin de hacer fuego y lograr de manera más accesible las preciadas brasas. No fue la primera vez que Rodríguez Palacios habló bien de nuestro país. Lo escuché en otro programa resaltar lo que hacemos y preparó un chivito como debe ser.
A propósito del sistema referido, si se busca en Internet se confirma el dato. En diversas páginas web de empresas argentinas dedicadas a la fabricación de útiles parrilleros ofertan el arquetipo uruguayo como disímil al propio.
En resumen dejo constancia de dos cosas. Primero: pese al conflicto por Botnia, comprobar, y van, la existencia de muchísimos y buenos patriotas allende el río Uruguay y de la Plata que valoran y respetan lo de nosotros. Segundo: La imperiosa tarea de conocer, valorar y mejorar nuestra gastronomía, la de su gente, ambiente y cultura.
A la hora de la receta, le cuento la prueba que hice. En el foro Diver- Bio a propósito de los Pimientos de Gernika se dio cuenta de lo siguiente, es muy recomendable.
La parrilla es el instrumento fundamental en esta práctica y en lo relativo a Uruguay no hay mucha discusión. La estructura (rejilla en definitiva) se fabrica en general a partir de un marco de hierro ángulo o te, soporte de la sucesión paralela de varillas. Coexisten variaciones en la armazón en cuanto a forma y disposición, pero hoy no ampliaré. Al respecto la misma se apoya en tres patas, como mínimo, o bascula respecto a un eje sujeto a la pared. El modelo argentino es diferente su construcción también metálica, emplea hierro del tipo ángulo, en la zona en que se deposita la carne; dispuestos de manera invertida (su cara cóncava hacia arriba) a la semejanza de canaleta, en la que discurre la grasa caliente hacia fuera de la zona de brasas.
Aviso a los navegantes: no seré yo quien diga si este o aquel son mejores tecnologías; los dos me merecen el mayor respeto, el asado será más rico o más feo en función de la carne y del asador, he dicho.
El programa Carnes Argentinas fue un muy buen ciclo a cargo del cocinero argentino Ariel Rodríguez Palacios y emitido a través de la señal cable Utilísima en el pasado semestre. El programa presentó recetas utilizando diversos cortes de animales, (vaca, cerdo, cabra, menudencias) en su mayoría cocidos en la parrilla aunque también utilizo el disco de arado. El conductor hace patente su excelente formación académica, estudio en Francia en la escuela Lenotre, entre otras. Es director de la Escuela I.A.G en Argentina, escribió valiosos libros y ha conducido con mucha sapiencia e histrionismo varios ciclos de cocina, con un gran enfoque en la técnica. Quien escribe se sorprendió cuando el Argentino daba a conocer el “Sistema Uruguayo”. A su tiempo Ariel explico que los de la Banda Oriental recurrimos a la del tipo de varillas y al leñero (o brasero) a fin de hacer fuego y lograr de manera más accesible las preciadas brasas. No fue la primera vez que Rodríguez Palacios habló bien de nuestro país. Lo escuché en otro programa resaltar lo que hacemos y preparó un chivito como debe ser.
A propósito del sistema referido, si se busca en Internet se confirma el dato. En diversas páginas web de empresas argentinas dedicadas a la fabricación de útiles parrilleros ofertan el arquetipo uruguayo como disímil al propio.
En resumen dejo constancia de dos cosas. Primero: pese al conflicto por Botnia, comprobar, y van, la existencia de muchísimos y buenos patriotas allende el río Uruguay y de la Plata que valoran y respetan lo de nosotros. Segundo: La imperiosa tarea de conocer, valorar y mejorar nuestra gastronomía, la de su gente, ambiente y cultura.
A la hora de la receta, le cuento la prueba que hice. En el foro Diver- Bio a propósito de los Pimientos de Gernika se dio cuenta de lo siguiente, es muy recomendable.
PIMIENTOS MARCELO JUANICO
Ingredientes: Catalanes, queso roquefort, nueces, coñac, mondadientes.
Preparación: elija los catalanes según su gusto, están los picantes o de la mala palabra y los dulces. Limpiarlos. Corte el extremo (tapa) del cabito y extraiga las semillas. Mezclar el queso roquefort pisado, las nueces picadas y un chorro de coñac. En mi caso lo suavicé con un poco de queso Colonia rallado. Rellenar con lo obtenido los morrones. Cierre la boca de los morrones con un mondadientes. Depositarlo sobre un tejido o en el sector de la parrilla adonde se ubican las menudencias. Se asan con poca brasa rotándolos cada tanto. Como guarnición de carnes asadas es espectacular.-
Publicado en Semanario Entrega 2000 el día 20.02.09 en la sección Las Recetas de Marcos Ruella.
Preparación: elija los catalanes según su gusto, están los picantes o de la mala palabra y los dulces. Limpiarlos. Corte el extremo (tapa) del cabito y extraiga las semillas. Mezclar el queso roquefort pisado, las nueces picadas y un chorro de coñac. En mi caso lo suavicé con un poco de queso Colonia rallado. Rellenar con lo obtenido los morrones. Cierre la boca de los morrones con un mondadientes. Depositarlo sobre un tejido o en el sector de la parrilla adonde se ubican las menudencias. Se asan con poca brasa rotándolos cada tanto. Como guarnición de carnes asadas es espectacular.-
Publicado en Semanario Entrega 2000 el día 20.02.09 en la sección Las Recetas de Marcos Ruella.