MISTERIO Y AMOR EN LAS HABAS
A
pesar de sus virtudes, fueron acusadas de lo peor y no ahora, culpa de los
indecentes de las redes, más bien bobos viejos. Desde mucho tiempo atrás y por
usar un término actual, le hacen bullying a las habas.
Son
fuente de proteínas, azúcares, ricas en fibra, hierro y potasio. Frescas como
todo producto es más saludable y accesible su manejo en la cocina. La versión
conservada, esto es cuando se presenta seca, es también valioso su aporte
nutricional, solo que requiere un remojado y cocción más larga pero no es tarea
inaccesible. Son baratas y por ese lado pierden frente a la glamorosa arveja
que se viste de gala en una Ensalada Rusa, vaya imperial nombre.
Entonces nuestro grano de hoy, cuya cédula de identidad científica la
presenta como Vicia faba es una de las legumbres domesticadas más antiguas. Los
primeros parientes nuestros, aquellos recolectores cazadores vestidos a la moda
con cueros, de alguna manera u otra las tuvieron en cuenta y hasta nuestros
días “rara vez se consumen en el norte de Europa y en Estados Unidos, mientras
que están constantemente presentes en los hábitos culinarios de los países
mediterráneos y de Oriente Medio” (1)
Su
existencia y gloria no ha sido fácil. En todas partes se cuecen habas dice
parte del refrán pero no siempre fue así.
“Efectivamente, a pesar de ser un elemento tan presente en varias de las
cocinas de todo el mundo, siendo la tercera leguminosa de grano de alimento más
importante después de la soja y la arveja, su imagen positiva es relativamente
reciente” (2)
En Egipto, época de los faraones era algo impuro por lo tanto comida de
los esclavos. Con eso queda dicho la consideración que le tenía esa cultura a
estos granos.
Fue
en la Grecia del siglo VI a.C. se dio la prohibición que más ha intrigado y ha
sido objeto de más especulación: la que provino de Pitágoras. Si, el mismo que
usted estudió en las clases de matemáticas del liceo: “El filósofo y matemático griego del siglo VI a.C.,
Pitágoras, vedó a sus discípulos el consumo de esta legumbre porque generaba ventosidades,
causaba terrores nocturnos e incitaba a la lujuria, entre otras consecuencias” (3)
En
una singular teoría, “La idea era que los muertos enterrados, liberaran sus
almas bajo tierra en forma de gas, que era absorbido por las plantas a
medida que crecían. Si comían habas, estarían digiriendo esas almas en forma de
viento” (2)
Al poeta Horacio todo eso le pareció
gracioso y se refería burlonamente a las habas como "los familiares
de Pitágoras". (2)
Entre las explicaciones, hay hasta una política. Las habas eran
utilizadas en la antigua Grecia para votar: las más claras representaban
"sí", y las negras, "no".
Pese a las grandes creencias malignas con la que era
relacionada, esta legumbre fue parte de la dieta de romanos, griegos. En la
Edad Media se empleaban, solo en animales ya que eran consideradas un alimento
de clase baja, de donde proviene la expresión clásica “No vale ni un haba”.
(4)
Volvamos
a Roma. “En los funerales, se
esparcían habas sobre las tumbas para dar paz a los difuntos mientras que las
habas tostadas se distribuían, junto con el pan, durante aquellos “días celebrando
la memoria de los antepasados de la familia. Fue común en Italia durante
la Edad Media.
Al comer semillas, los seres humanos podrían perpetuar la
vida, mientras que los muertos podrían renacer a una nueva existencia.
La celebración del Día de los Difuntos,
instituida en el monasterio de Cluny (Francia) en 998, supuso la
cristianización de una antigua fiesta celta en honor a los muertos. (1)
Ya
más cerca a estos tiempos, “en relación a este
alimento, nació la costumbre española de colocar dentro de las roscas de reyes
un haba y un regalo. A quien le tocaba el
regalo era coronado como el rey de la fiesta, mientras que a quien le tocaba
el haba era
llamado ‘tonto del haba’
o tontolaba.”
Todo
muy lindo, mucha historia, pero sigo pensando que las abuelas y sus refranes es
sabiduría, frente a ellas me rindo. A manera de reivindicación. Si para una
abuela judía será pócima sanadora y de cariño su infaltable caldo de pollo, las
españolas, tan queridas como aquellas, con su infinito afecto te dirán: “A
falta de gallina bueno es caldo de habas”.
Bibliografía
consultada:
1.- Pasqualone, A., Abdallah, A. & Summo, C. Significado
simbólico y uso de las habas en los alimentos tradicionales de la cuenca
mediterránea y Oriente Medio. J. Etnia. Alimentación 7 ,
39 (2020). https://doi.org/10.1186/s42779-020-00073-1
3.- https://www.larioja.com/comarcas/habas-20210603095721-nt.html
4.- Habas,
origen, historia y creencias sobre esta hortaliza. (plantamus.com)
Columna emitida en el programa Abrazo País, CX
4 Radio Rural, el 11 de noviembre de 2023.